Con No hay nada que huya, de Joaquín Fabrellas, la bola ha echado a rodar… Nos referimos a Caja de Formas, la colección de poesía de Piedra Papel Libros.
Poco a poco los cuadritos de la contraportada se irán llenando de color… Conforme la colección vaya creciendo, esperamos ir dibujando un particular esbozo de una parte del paisaje poético actual. Desde luego, estamos cansados de las luchas feudales o las guerras de bandas. Queremos demostrar que es posible hacer buena poesía desde fronteras bien distintas. Lo liminar es importante, de hecho, pretendemos enriquecer las miradas estrechas a propósito del hacer poético. También vinimos para eso. Por suerte, contamos con varias escenas en la ciudad para achuchar en esa onda.
De todas formas, no nos interesa la poesía local (así, tan no sé cuánto…). Creemos, por el contrario, en la excelencia de lo que escriben algunos de nuestros poetas coetáneos, cercanos y menos cercanos. Cansados también del tedioso palabreo del que espera sin hacer, construimos de espaldas a lo institucional, de espaldas, también, a los que arrojan la toalla sin ni siquiera mancharse. Venimos a intentarlo al menos… Esto es poesía, desde luego, pero no solo eso: es nuestra manera de ser y estar. Queda camino entonces.
No hay nada que huya se presentará el viernes, 23 de enero, a las 21:00 en el bar Tijuana (Jaén). La presentación se enmarca en La Caja de Lot, ya sabéis, el ciclo poético mensual que organizamos Sergio Franco, Yolanda Ortiz, Ángel Rodríguez y un servidor, Juan Cruz. Al día siguiente, ya podréis comprarlo en librería Metrópolis (para empezar).
XV
La oscuridad en ti es un rito milenario
te has dejado aquí
tu vestido sin cuerpo
reconozco el silencio
el humo de tus labios
todos los viajes que te llevarán a ninguna parte
(No hay nada que huya, Joaquín Fabrellas. PPL. Jaén: 2015).